El Calvario de Beceite se cree que fue construido en el siglo XVIII, aunque una reconstrucción importante se llevó a cabo en 1940, dándole su aspecto actual. Este lugar es un punto religioso de importancia en la localidad y se encuentra en un hermoso entorno natural.
Desde el Calvario, parte un sendero que asciende a la ermita de Santa Bárbara, pasando por las catorce estaciones del Vía Crucis. Cada una de estas estaciones tiene forma de pilones coronados con una cruz y decorados con baldosas pintadas que representan escenas de la pasión, muerte y resurrección de Jesucristo.
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En el pasado, durante la Cuaresma, todos los domingos por la tarde se realizaba una procesión desde la iglesia, donde se rezaba el Vía Crucis. Esta procesión incluía una visita al Calvario y otros puntos importantes en la ruta. El Calvario también se usa tradicionalmente para la procesión del Santo Entierro que se celebra el Viernes Santo, y durante el recorrido, se hacen sonar carraus, que son carraclas o carracas.
El día de San Juan también se realizaba una procesión a la ermita de Santa Bárbara, donde se celebraba una misa en honor a la Santa. Además, en el siglo XX, cuando la minería era una actividad importante en la población, los mineros subían a la ermita el 4 de diciembre, día de la festividad de Santa Bárbara, para hacer una procesión con la imagen de la Sant.
Hoy en día, su uso principal es como mirados panorámico del casco y su entorno natural.
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