Las ermitas en la comarca no solo tienen un valor religioso, sino que también son una parte esencial del patrimonio arquitectónico y artístico, y a menudo sirven como centros de reunión social durante las romerías.
La Ermita de San Juan en las afueras del pueblo de la comarca es un ejemplo notable de la arquitectura de las ermitas en la región. Esta construcción de estilo gótico-renacentista se encuentra en un entorno rodeado de cipreses centenarios que enmarcan el camino de acceso. La ermita consta de una sola nave con una bóveda de crucería y una cabecera poligonal.
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La fachada de la ermita exhibe un estilo renacentista y contiene inscripciones con la fecha de finalización de la obra en 1609. En su exterior, se pueden apreciar sólidos contrafuertes y la sobriedad del ábside, que solo tiene dos pequeñas ventanas abocinadas en los laterales. Además, en las cercanías de la ermita se encuentra la antigua casa del ermitaño.
La ermita de San Juan es un lugar importante para la comunidad local, y se celebra una romería en su honor el día de San Juan, que cae el 24 de junio. En la actualidad, esta celebración tiene lugar el sábado más cercano a la festividad, y por la tarde se organiza una fiesta con baile en el lugar. Estas festividades y romerías son momentos en los que la comunidad se reúne, socializa y celebra su herencia religiosa y cultural.
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