La casa de Chimeta es un edificio de cuatro alturas que se encuentra en una esquina, con un extremo que da a la plaza del ayuntamiento. Uno de los aspectos más destacados de esta casa es su vértice en forma de proa, que le confiere un aspecto distintivo.
El edificio cuenta con un gran alero en forma de hastial que se extiende por más de 1 metro de vuelo, y que cubre dos balcones corredizos que hacen esquina y cuentan con barandillas de madera. La construcción de la casa está hecha de sillería, y en su fachada se ha aplicado un revestimiento de cal, aunque en las esquinas se deja a la vista el sillar original. Este tipo de construcción y diseño arquitectónico es característico de ciertas regiones de España y aporta una estética única a la casa de Chimeta.