La Ermita de Santa Ana de Calaceite forma un conjunto de gran interés etnográfico en un entorno rural que incluye la ermita en sí, la casa del
ermitaño, una fuente y una noria de tracción animal. Este conjunto se encuentra enmarcado en un hermoso paisaje de cultivos de olivo, almendro y bosque de pineda y encina.
La ermita está construida en sillería y consta de una sola nave con cuatro tramos separados por arcos diafragma de medio punto que se apoyan sobre pilastras adosadas al muro. El edificio es de una gran simplicidad arquitectónica y está cubierto a dos aguas. La portada es de medio punto y presenta una imposta en el arranque. En la parte frontal de la ermita, se encuentra una espadaña de dos ojos y una cornisa de piedra moldurada. Adosada a la ermita, está la casa del ermitaño, de sillería, con una puerta de acceso de medio punto, y con una lonja con dos arcadas en un lateral que se cedía para el refugio de rebaños y pastores.
En el interior de la ermita, en la cabecera, se pueden observar detalles interesantes, como cerámica de Alcora firmada por José Cotanda. Estos elementos artísticos y decorativos añaden valor a la ermita y muestran la riqueza cultural de la región.
En sus fiestas en primavera se juega a la Barra ensabonada
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La Barra ensabonada, o cucaña, es un juego tradicional que se practica en muchas culturas alrededor del mundo. Consiste en trepar o escalar un poste vertical, la barra, que se lubrica con alguna sustancia resbaladiza, como jabón. El objetivo es llegar a la parte superior del poste y, a menudo, alcanzar un premio que se coloca en la cima. También se realizan otros juegos populares como estirar la cuerda.
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La ermita de Santa Ana, de estilo renacentista y construida con piedra de sillería, tiene una rica historia y tradición religiosa en la localidad. Una de las tradiciones más destacadas es la rogativa de lluvias, que tuvo lugar durante muchos años desde 1701 hasta 1878. Durante esta rogativa, la comunidad se dirigía en procesión hasta la ermita con la reliquia de la Santa Espina, que se conserva en la iglesia parroquial. Anteriormente, se realizaba esta rogativa con un crucifijo en lugar de la reliquia de la Santa Espina.
En la actualidad, la festividad de Santa Ana se celebra el sábado antes del Lunes de Pascua Florida, como parte de las Fiestas de Primavera. Estas festividades reúnen a tres celebraciones diferentes: Santa Ana, San Isidro y la Santa Espina. Durante la festividad, la gente del pueblo va a comer a la ermita, y por la tarde se realizan juegos tradicionales y baile. Estas festividades son una parte importante de la vida social y cultural de la comunidad local.
